Nuestra ropa, los complementos que la acompañan, nuestro corte de pelo, son nuestra seña de identidad, y por eso es tan importante cuidar nuestra imagen. Sí, la belleza está en el interior, pero ese interior pocos lo ven, y sobre todo en una primera impresión, será tu imagen la que será cuestionada, juzgada o alabada y sólo tú puedes marcar la diferencia. La forma de mostrarte a los demás, lo que proyectas, el mensaje que mandas con tu estilo personal, puede convertirse en una herramienta muy útil y de ella puede depender el que te abran o cierren algunas puertas. Y es que existe en los seres humanos una tendencia a juzgar a las personas o a las cosas, a partir de una característica o cualidad, y a partir de esta característica particular nos formamos una idea general. De esta forma, cuando encontramos que una persona es atractiva, tendemos a atribuirle otras cualidades positivas, como por ejemplo, la simpatía, la honradez o la educación, y lo mismo ocurre en caso contrario, cuando un individuo nos resulta poco atractivo físicamente, automáticamente le atribuimos otras cualidades que consideramos negativas, como ser maleducado, antipático o huraño. Este fenómeno es conocido con el nombre de Efecto Halo.
La apariencia del todo, cómo decía el emperador romano Cayo Julio Cesar, la mujer del Cesar no sólo ha de serlo, sino parecerlo. Dejando de un lado todo el machismo y superficialidad que encierra esta frase, lo cierto es que la apariencia lo es todo. En una primera impresión, nadie va a intentar descubrir que es lo que escondes debajo de esa mata de pelo horrible o detrás de esas oscuras ojeras, si no que lo único que verán es a una persona descuidada, e inmediatamente se la valorará negativamente.
Hay muchas personas que de verdad lo intentan, pero resulta inútil, y por más que intentan conseguir una buena imagen persona, pocas veces lo consiguen, y es que, vestirse, peinarse, arreglarse, también constituye una forma de arte, y son muy pocos los que lo dominan.
Así que si estas navidades no sabes que regalar a esa amiga tuya que nunca se peina, a esa madre que ya no se cuida o a esa hermana que es tan hortera que asusta, hazles un favor y regálales los servicios de un asesor de imagen. Te recomiendo a Marta San Miguel, una Personal Shopper que trabaja en Madrid y en el País Vasco, ofreciendo sus servicios de asesoría en el vestir, estudio del color, estudio morfológico, eventos, shopping, asesoría de imagen online, curso de automaquillaje, tu maleta perfecta y servicio de compras por encargo. Una vez que estudia el estilo personal de cada cliente en función de qué es lo que mejor te sienta, de sus gustos y forma de ser, realizará una asesoría en el vestir, adaptando la propia ropa al estilo personal de cada uno.
¿Cómo trabaja un personal shopper?
Para todas esas personas que no aciertan con su look ideal, que no llegan a verse nunca favorecidas, que no saben identificar que es lo que mejor les sienta, para todos esos que no saben lo que es un buen fondo de armario, y para todos los consideren que necesitan un asesor de imagen, está la figura del personal shopper.
En primer lugar, el personal shopper realizará un estudio morfológico, es decir, estudiará tu cuerpo para poder sacar partido a todo el potencial que encierra y para intentar ocultar esos aspectos en los que no destacas tanto.
A continuación, realiza un estudio cromático, a fin de encontrar los colores que más te favorecen, en función del tono de tu piel, ojos y pelo.
Con tu estilo ya definido, en base a tus gustos y a tu personalidad, realizará una asesoría de imagen en la que estudiará tu fondo de armario para adaptara tu propia ropa a tu estilo personal y te aconsejará sobre el tipo de prendas más adecuadas según el momento del día o de las circunstancias.
También te enseñará a maquillarte, destacando tus puntos fuertes e intentando disimular los más débiles y te acompañará a hacer tus compras de ropa, maquillaje y complementos en base a tu presupuesto.
Una buena imagen personal aporta seguridad y confianza, no lo olvides.